Sábado 17 de enero:

1. Durante los dos/tres primeros días, la actividad de la fermentación se ha observado claramente, el borboteador ha trabajado de forma sostenida, se ha visto la corona de levadura superficial alcanzar un máximo bastante alto y luego descender. La temperatura se mantiene a unos 18ºC en la cocina de promedio.

2. Después de esos tres días, la actividad casi no se nota. La cambio a una habitación que de día tiene calefacción, a unos 20º de pico.

3. Voy midiendo la densidad cada 36 horas más o menos con el refractómetro, que resulta ser “impreciso” ya que no se distingue bien la línea de separación refractada.

4. La cerveza “está buena” pero tiene por un lado, mucho gas, y por otro, mucho poso, tal como se observa al hacer alguna medida con el densímetro.

5. La cosa se estabiliza a 1020 de densidad, con 9º Brix, y la paso a secundario con las precauciones de siempre.

6. Mientras se va pasndo al cubitainer se observa que grumos de levadura ascienden a la superficie, como si no hubiese acabado del todo la actividad, cosa que otras veces no he observado.

7. Pongo el cubitainer en la cocina, a unos 18ºC.

8. Limpio todo. He tardado una media hora larga.

Lunes 2 de febrero:

1. La fermentación secundaria transcurre sin actividad aparente, como siempre. Lleva ya 16 días, por lo que decido embotellar.

2. Se embotella con 7 gr/l de azúcar blanco (no tengo otro...) para la carbonatación.

Jueves 12 de febrero:

1. Desde que se embotelló se dejaron las botellas en una habitación con calefacción, a unos 20-22ºC, bajando a 18ºC por la noche.

2. Este día 12 de febrero se bajan al garaje, donde la temperatura marca 5-6ºC.

F I N